Infografía
“La infografía no es hacer dibujitos”, opinan los infógrafos profesionales mas entendidos en el tema. Le concepto alude a la posibilidad de combinar imágenes e información, es decir, que a través de representaciones icónicas se transite un monto de información, capaz de ser captado con el mínimo golpe de vista, siendo su transmisión rápida y con mayor incidencia en la memoria de corto plazo.
El lenguaje icónico está estructurado por grafemas (unidades mínimas) que conforman iconemas que a través de la incrustación y la yuxtaposición conforman los íconos.
Estos pueden ser señaléticos (señales), ideográficos (transmiten ideas). Gráficos, pictóricos (fotos, imágenes, dibujos), secuenciales, superiores, etc.
Goerge Miller estableció que el total de información que se puede captar en un solo punto de vista es de 7 cifras + - 2 componentes. Considerar esta fórmula es esencial para que nuestra producción no esté cargada de elementos que dificulten su comprensión o, por el contrario, la información sea insuficiente o incompleta.
La creatividad juega un papel central en las infografías, sobre todo en aquellas que transmiten mensajes sociales o información periodística. Así también, los aportes realizados por la psicología de la forma y la percepción aportan elementos teóricos fundamentales para la construcción de estos mensajes gráficos.
Conocer los variados códigos visuales, así como estar “empapado” con información sobre la temática a tratar, es crucial para el diseñador que debe encarar la creación de este tipo de piezas gráficas. Implica la utilización de estrategias de comunicación y diseño, de valoración social y criterio estético, sin dejar de lado consideraciones de carácter ético y legal.
Esta actividad no solo es un arte, sino que implica un compromiso como comunicador, educador y agente de cambio social, considerando que en la actualidad la cultura de la imagen está en auge y la infografía surge como nueva forma de expresión, comunicación, publicidad y educación.
“La infografía no es hacer dibujitos”, opinan los infógrafos profesionales mas entendidos en el tema. Le concepto alude a la posibilidad de combinar imágenes e información, es decir, que a través de representaciones icónicas se transite un monto de información, capaz de ser captado con el mínimo golpe de vista, siendo su transmisión rápida y con mayor incidencia en la memoria de corto plazo.
El lenguaje icónico está estructurado por grafemas (unidades mínimas) que conforman iconemas que a través de la incrustación y la yuxtaposición conforman los íconos.
Estos pueden ser señaléticos (señales), ideográficos (transmiten ideas). Gráficos, pictóricos (fotos, imágenes, dibujos), secuenciales, superiores, etc.
Goerge Miller estableció que el total de información que se puede captar en un solo punto de vista es de 7 cifras + - 2 componentes. Considerar esta fórmula es esencial para que nuestra producción no esté cargada de elementos que dificulten su comprensión o, por el contrario, la información sea insuficiente o incompleta.
La creatividad juega un papel central en las infografías, sobre todo en aquellas que transmiten mensajes sociales o información periodística. Así también, los aportes realizados por la psicología de la forma y la percepción aportan elementos teóricos fundamentales para la construcción de estos mensajes gráficos.
Conocer los variados códigos visuales, así como estar “empapado” con información sobre la temática a tratar, es crucial para el diseñador que debe encarar la creación de este tipo de piezas gráficas. Implica la utilización de estrategias de comunicación y diseño, de valoración social y criterio estético, sin dejar de lado consideraciones de carácter ético y legal.
Esta actividad no solo es un arte, sino que implica un compromiso como comunicador, educador y agente de cambio social, considerando que en la actualidad la cultura de la imagen está en auge y la infografía surge como nueva forma de expresión, comunicación, publicidad y educación.
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